Tras más de un año de intensa actividad concentrada en llevar a término el Proyecto de Reindustrialización de la Fábrica de Vesuvius Ibérica en Miranda de Ebro, las empresas Tropical Millenium S.L. y Vesuvius Ibérica S.A. han firmado un acuerdo para el uso industrial de las instalaciones en el Polígono de Bayas por parte de Tropical Millenium.
Este proyecto ha sido posible gracias al ejemplificante proceso colaborativo llevado a cabo entre Vesuvius Ibérica, la compañía LHH (empresa líder a nivel mundial en procesos de cambio, transformación y reindustrialización, perteneciente al Grupo Adecco), Miranda Empresas (oficina de promoción industrial del municipio mirandés) y FAE Miranda (la Federación de Asociaciones Empresariales), así como al apoyo continuo de las administraciones, a través del Ayuntamiento de Miranda de Ebro, la Junta de Castilla y León a través de la Fundación Anclaje, el Ministerio de Industria y los agentes sociales.
La nueva empresa, que se llamará Tropical Miranda S.L., y que arranca con un fuerte compromiso local, pertenece al grupo Tropical Millenium S.L., líder en su sector, con base en la provincia de Málaga y más de un 80% de su negocio dedicado a la exportación. Su principal actividad, desde hace años, es la producción, importación, exportación y distribución de frutas tropicales, principalmente aguacates, mangos, papaya y pitaya roja.
La empresa malagueña pretende empezar su actividad industrial en el mes de junio próximo, una vez finalizados los trabajos de acondicionamiento e instalación de nuevos equipos de producción. La creación de empleo prevista para esta primera fase es de 25 puestos de trabajo, con previsión de duplicar la plantilla a lo largo de 2022.
Vesuvius Ibérica completa de este modo un largo proceso, no exento de obstáculos, confirmando que se cumplen los compromisos del acuerdo con los antiguos trabajadores, de la mano de LHH como partner global de Vesuvius en la búsqueda de inversores y acompañamiento de los mismos, y se alegra de poder ofrecer una solución sólida con una oferta de trabajo dos veces mayor que el empleo destruido tras el cese de su actividad en octubre del 2019, superando el cumplimiento del objetivo inicial de mantener la actividad industrial y el empleo en la planta de Miranda de Ebro.
